Sabéis a veces pienso que he perdido la fe, he perdido la fe en esta industria falsa e hipócrita donde muchos se hacen llamar artistas, es grave. 
Te eligen para ser la nueva revelación del año, en este país de catetos e incultos que suben peldaños a base de insultos y engaños, te ponen a dieta, te maquillan, te dicen lo que tienes que hacer porque la fórmula para vender es esa, te escriben las canciones para hacer la música más vacía, banal y pegadiza posible y aún así triunfará seguro, mientras tu eres sólo un puto muñeco en manos de empresarios con panza y puro.
Invertir millones en mentir para persuadir a los típicos gilipollas que aún te sorprenden con sus mensajes subliminales de que una vida mejor es posible.
Y te haces llamar artista? Sólo eres el último eslabón en la cadena del patético comercio musical español, te van a estrujar como a una esponja hasta sacarte todo el jugo y cuando ya no les sirvas irán a por otro y tu acabarás en el cajón del olvido, famoso arrepentido. El arte no se puede modificar ni simplificar para hacerlo vendible. Llenais vuestras listas de ventas con la morralla más canalla del planeta, es increíble!!
Sois sombras de la verdad de un triste timo.